El urbanismo como un inventario de lo posible
“El urbanismo no es solo el estudio de lo que ha pasado y de lo que es probable que suceda, sino sobre todo proyectar lo que es posible hacer que suceda” (Bernardo Secchi, 2014)1
El potencial de la urbanización informal
La construcción de la ciudad informal en el Perú, viene demostrando una vitalidad que podrìa fundamentarse en la validez del discurso general del libre mercado. Se observa que esta dinámica crea riqueza a partir de espacios sin valor aparente. Esta generación de valor de cambio recrea la satisfaccion de necesidades del mundo formal.
Los mecanismos de mercado tambien operan en las relaciones del grupo social de menores ingresos. Ellos satisfacen sus similares necesidades socio-espaciales, las cuales van mas allá del acceso a la vivienda o los servicios básicos. Como parte de su derecho a la ciudad o la ciudadania de mercado este grupo incorpora elementos mas sofisticados como la especulación inmobiliaria.
Via Pasamayito (Fuente: Municipalidad Metropolitana de Lima, 2022)
Mas allá de la necesidad de la vivienda
Este fenomeno ha sido registrado, directa e indirectamente, en la urbanización en laderas. Es notoria la existencia de reglas donde se busca limitar la ocupación de personas que no tienen la necesidad. Por ejemplo hay periodos máximos en las cuales el terreno debe estar sin ocupación.
Estas prácticas informales tienen un caracter particular dentro de esta forma de ocupación y desarrollo inmobiliario. La figura formal expresada, por ejemplo, a traves de la Ley de Desarrollo Urbano Sostenible (DUS) y su reciente reglamento, mantiene distancia con estas prácticas.
Un componente que implicitamente aborda una faceta, de este carácter particular del desarrollo informal, es el llamado Gestor de Tierras. Esta figura burocrática autónoma tiene el rol de coordinar la provisión de vivienda barata, empleando recursos financieros provenientes del presupuesto público y de la gestión de terrenos del Estado.
Sin embargo, las enseñanzas de la ocupación informal en términos de la iniciativa individual, la auto-organización, la coordinación y la cooperación (legales e ilegal) entre actores privados y públicos no se toma en cuenta.
El gestor de tierras posible
El gestor de tierras, en el ámbito informal, es el traficante de tierras que ilegalmente intermedia la obtencion de suelo, su acceso e incluso su consolidación. En este caso los recursos así como los nodos de decisión política en juego se locaizan tanto en los ámbitos privados como públicos, y a traves de diferentes escalas.
El nivel de decisión municipal es donde se desarrolla el juego contextual que materializa la ciudad informal; mientras que es a nivel nacional donde se asignan los presupuestos o se legisla la consolidacion urbana.
El proceso de urbanización informal ha creado el esquema de las posibilidades de su propio desarrollo. Además, viene estableciendo las normas y reglas que tienen el poblador, el traficante, la autoridad municipal, el legislador y los funcionarios públicos, para abordar la satisfaccion de sus intereses.
Por tanto, para recuperar la soberanía sobre el suelo, iniciativa de la organización, se debe reconocer el continuo orden emergente presente en la evolución de la cultura peruana, y dejar de insistir en implementar solamente la orden del plan modernista.
Referencia
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Bernardo Secchi. 2014. Primera lección de urbanismo. Pontificia Universidad Católica del Perú. Lima. ↩