Flujos globales, escala local y gestión territorial
El permanante conflicto entre la comunidad, el Estado y la empresa minera en Las Bambas, motiva la presente descripción de la estructura y funcionamiento de los territorios y sus escalas en cuestion. A fines del siglo pasado, Manuel Castells 1 sugiere la existencia de una fractura en la sociedad, entre los flujos globales del capital y las actividades e identidad de los ciudadanos a escala local. Considerando esta referencia teórica, podemos delinear un marco de referencia conceptual que nos aproxime al entendimiento de la estructura del sistema territorial, e inferir su funcionamiento en la escala de los territorios en cuestión, desde las Bambas, el gobierno regional de Apurimac, el Estado Peruano, y los espacios de decisión internacionales, relacionados a la extracción, transporte y comercialización y empleo del mineral. Un primer atributo del sistema es entonces su estructuración en multiples escalas, donde se ejerce soberania dentro de los espacios definidos política y económicamente. En estos diferentes niveles territoriales, se encuentran los componentes del sistema. Segun Castells, la brecha entre los espacios locales y globales se viene agrandando debido a que los intereses de los actores en ambas dimensiones no coinciden. Pero la observación de la estructura, descrita lineas arriba, tambien hace notar la presencia de una mediación entre los dos extremos de la escala. Estas escalas intermedias son cubiertas por la estructura y función del Estado en sus niveles territoriales de gestión.
Una interpretación de la descentralización (Fuente: andina.pe)
Por tanto, el estudio del conflicto, asumido como desencuentro de intereses que operan en escalas diferentes, tendría que tomar en cuenta los mecanismos políticos e institucionales con los que el Estado aborda la demanda de los ciudadanos. Específicamente se puede incorporar al análisis del conflicto, el proceso de Descentralizacion 2 que desde el año 2002 viene evolucionando e incorporandose progresivamente en el aprendizaje organizacional del Estado Peruano. Esta política de Estado, y actividad de gestión territorial, llevada a cabo bajo el paraguas del modelo de libre mercado presente en el país, se orienta al desarrollo economico teniendo como fundamentos tanto el incremento de la productividad, como la provision de servicios al ciudadano para mejorar su bienestar personal. Puesto el esquema metodológico sobre la mesa, el analisis se acota dentro de los límites de la gestión territorial a través de la inversión pública. Cabe señalar en todo caso que, el ciudadano o beneficiario de los servicios públicos, mantiene su independencia como agente de cambio a partir de su autonomía individual o grupal. De esta manera, el conflicto muestra a la acción social y su encuentro con el Estado y con la operación de los flujos globales de movimiento de bienes y servicios. Al parecer el Estado no cumple en tiempo y forma con las demandas que motivan esa acción. La solución es politica y económica, y requiere incorporar esa acción social en instituciones con real participación de los ciudadanos en las actividades de gestión territorial. El proceso de Descentralización, provee la institucionalidad y podrian guiar esa transición hacia un mayor control ciudadano en la gestión de la inversión pública.
Nota “El proceso de descentralización se realiza por etapas, en forma progresiva y ordenada conforme a criterios que permitan una adecuada asignación de competencias y transferencia de recursos del gobierno nacional hacia los gobiernos regionales y locales. Los Poderes del Estado y los Organismos Autónomos así como el Presupuesto de la República se descentralizan de acuerdo a ley” (Artículo 188, Ley de Bases de la Descentralización).